Con la gira de trabajo del pasado viernes del pasado 24 y 25 de marzo del 2017 se dio un paso más en la construcción del Sendero de Paz Madre Tierra. Se hace sobre las huellas dejadas por los voluntarios que han hecho transitable y han consolidado una senda hermosa en que, además de trabajar en su acondicionamiento, también se abrieron a la paz que ofrece el bosque.
Un obra como la que Paulino y su familia han construido merece ser reconocida, muy pocos han luchado contra corriente para recuperar de la deforestación total tantas hectáreas, sabiendo que tendrían que cambiar la producción de ganadera, por lo que el bosque les iba a deparar en el futuro. Una apuesta que solo habiendo vivido como un nativo de Térraba y recordando cómo era la vida de hermosa cuando había bosque y nada les faltaba, podía conocer.
De Paulino y Fidelia siempre hemos escuchado esta historia de vida como lo es, una acción que se le debía a los mayores, a su abuela; al recuperar el bosque recuperarían la identidad que les arrebataron, volverían los animales con los que coexistían en armonía, rebrotarían las aguas de las nacientes que se secaron al dejar sin árboles su territorio y mostrarían a su pueblo que esa senda tan cuestionada al inicio sería lo que en el futuro habrá que hacer.
Con la visita de representantes de la Universidad Nacional, Universidad de Costa Rica y ser un tema apoyado por CONARE se le da un reconocimiento a este esfuerzo, se respalda desde la academia una iniciativa valiente y a un pueblo que con apoyo puede ver resurgir lo mejor de su esencia ancestral. Cada trabajo académico, investigaciones, tesis, reportes, etc. que se han hecho o se hagan en adelante construirán un mejor futuro para esta comunidad porque se valora y honra con estas acciones la calidad humana puesta al servicio de la Madre Tierra.
Representación caminable de Tjër, que es el símbolo espiritual más grande y bello de los Brörán Tjër. Para los Térrabas un ícono de la lucha por conseguir mejores condiciones para el estudio de sus hijos.
Esta visita va a generar apoyo específico en varios frentes, necesarios para ir acondicionando a Rincón Ecológico y Cultural Térraba como un destino didáctico y pedagógico, apto para el estudio, la investigación el arte y toda manifestación cultural. El turismo etnográfico, rural y ecoturístico serán los que se acojan además del anterior, todos con la misión de aportar conocimiento, trabajo e integridad a una obra que se necesita cuidar, mantener y hacer sostenible.
La visita del erudito Luis Poveda fue en sí una lección de vida, cada conversación aderezada con su humor, los poemas y su sabiduría, es un reconocimiento al aporte de Paulino a su familia al patrimonio natural de la región y del país. Todo este esfuerzo de conservación puesto en el Rincón Ecológico está dando sus frutos y a ellos les ha dado lo necesario para vivir. Inicia con él un aporte invaluable de inventariar la diversidad ecológica y sustentar de forma científica el arboretum y el jardín etnobotánico que se implementarán en este sitio.
La conversación a distancia con el Jefe Chief Grey Wolf, Presidente de la Nación Soberana Cherokee-Tejas, nos permitió oír que reiteraba su compromiso por aportar su contribución a este proyecto y nos desglosó los posibles aportes que haría en nombre de su pueblo.
Esta visita en particular revela que alrededor del proyecto Senderos de Paz Madre Tierra se erige una voluntad y mística que impulsa la imaginación y suma las ideas, surge “una magia” que se nota en una vibración de positivismo y bienestar que se convierte en sinergia y compromiso por dar lo mejor de cada uno y en hacer su mejor esfuerzo. Un paso a la vez, una acción en pro de la Madre Tierra, un vínculo que nace de los pueblos ancestrales, la protección de Sibö, es lo que necesitamos para que se concrete este proyecto que apenas inicia.
Luis Poveda, Paulino Nájera y los integrantes de esta gira tuvimos en honor de ser los que, con el recorrido de los meandros laberínticos construidos por los voluntarios, inauguráramos este sendero.
Gracias por su apoyo.
Guillermo Chaves Hernández