“Me topé con un conflicto muy complicado entre los seguidores del yoga o la meditación y el tantra. Los unos, estrictos vegetarianos, ascetas del sexo y el esfuerzo; los otros amantes del vino, del amor, la relajación del esfuerzo y la buena vida.

El muro que se ha construido entre estos dos caminos es casi infranqueable. Los caminos son tan distintos que Tilopa, gurú de tantra que vivió después de la muerte de Siddhartha Gautama (988-1069), no encontró un solo discípulo en la India, pues todos creían en la necesidad del esfuerzo alentado por dicho maestro y considerado innecesario en su versión del camino. Así fue como, cansado de sembrar en el desierto, Tilopa decidió irse para el Tíbet.

Mientras tanto, Naropa (1016-1041) se estaba yendo de allí porque todos sus maestros le exigían un esfuerzo que él sabía innecesario. Así las cosas, Tilopa y Naropa se encontraron en el camino. Uno bajando y el otro subiendo, cada uno en busca de su destino.

Después de compartir un rato en silencio, escuchando el canto de los pájaros y viendo el revoloteo mágico de una mariposa azul, Tilopa le dijo a Naropa algo como esto: no sé quién eres ni cómo llegaste hasta aquí. No sé si estás en busca de algo, o si solo recorres el camino para entretenerte. Pero ya que estás aquí conmigo, disfrutando de este momento perfecto, te comparto esta canción, porque este lugar y este momento son lo único que importa. No falta nada, ni nada sobra y ésta es la punta de la historia.

Cuando Tilopa terminó de cantar su canción ya Naropa había comprendido la esencia de su mensaje. De modo que uno siguió subiendo y el otro siguió bajando, cada uno muy contento de haber encontrado, sin esfuerzo, lo que andaba buscando.

Si comulgas con las creencias de uno de estos grupos o escuelas, vas a incomodarte con algunas de las enseñanzas que compartiré. Si desearas vencer ese obstáculo, y aprovechar al máximo este libro, te invito a leerlo como si las palabras fueran tuyas y a vivir cada experiencia como si fuera un recuerdo. Así no alimentarás la resistencia natural de la mente a valorar lo nuevo y te convertirás en el personaje central de esta historia. Además, eso te motivará a escribir la tuya propia”.

Este lugar y este momento,

es todo lo que importa,

no falta nada ni nada sobra,

esta es la punta de la historia.

Que lo que vale no se ve,

lo que se tiene es lo que se da.

Pues lo que existe está todo aquí

y está cantando hoy para ti:

Las ilusiones son traicioneras

y nos impiden vivir de veras,

pues nos ofrecen lo que no existe

cuando todo esto es suficiente.

Este lugar y este momento,

es todo lo que importa,

no falta nada ni nada sobra,

esta es la punta de la historia.

Los pensamientos son en la mente,

lo que es el viento para el ambiente.

No te confundas con sentimientos,

ni pierdas tiempo con argumentos.

Que aquí y ahora todo es factible,

hasta ser parte de lo imposible.

Lo que se vive no tiene nombre:

¡Solo de pan no vive nadie!